Cuando se habla de Inteligencia Artificial (IA), la mayoría de las personas asocian el término con la ciencia ficción y con tecnologías que resultan prácticamente inconcebibles. Sin embargo, la realidad dista mucho de las películas o libros que han trabajado la temática, puesto que esta tecnología se está estudiando en la sociedad desde hace casi 100 años y hace parte del día a día de múltiples sectores e industrias.
Conocer cómo surgió la Inteligencia Artificial y aprender más sobre su contexto, es una forma muy útil de entender qué es, cómo funciona, bajo qué preceptos se presentó como una necesidad social y cómo hoy en día representa es un pilar esencial dentro de los procesos cotidianos de muchas personas, negocios o empresas. Para profundizar en todo lo anterior, hoy queremos hablarle sobre los antecedentes de la Inteligencia Artificial y hacer un recorrido por su historia hasta la actualidad.
Aunque muchos no lo sepan, los primeros pilares de la IA se remontan a los años 30, de la mano de Alan Turing. Debido a todos los estudios científicos e investigaciones que se realizaron en este tiempo como respuesta a la Segunda Guerra Mundial y la necesidad de descifrar los códigos secretos que enviaba el ejército Nazi a través de su máquina Enigma, Turing empezó a trabajar en el uso de algoritmos y creó un sistema lo suficientemente inteligente como para predecir y evaluar los mensajes que se enviaban.
Además, Turing creía que “si una máquina tiene un comportamiento inteligente en todos los aspectos, entonces es inteligente”, por lo que se encargó de demostrar la eficiencia de las máquinas, inventó el famoso Test de Turing (un método utilizado para comprobar que ciertas tecnologías pueden dar respuestas muy similares a las de un ser humano e incluso ser indistinguibles) y terminó por convertirse en el padre de la Inteligencia Artificial.
Si bien es cierto que Alan Turing sentó unas bases muy fuertes en el estudio de la IA, no fue hasta 1956, con la participación de John McCarty, Marvin Misky y Claude Shannon, que por primera vez se hizo apropiación del término y se compartió de forma pública con la comunidad científica en la conferencia Dartmouth Summer Research Project on Artificial Intelligence. Antes de esto, a las tecnologías capaces de tomar decisiones complejas se les había dado muchos otros nombres y no se había logrado coincidir cuáles eran sus capacidades y funciones. Después de esto, fue posible determinar que las IA:
- Puede tener creencias o intenciones dentro de sus actitudes mentales.
- Tienen la capacidad de aprender.
- Pueden resolver múltiples problemas desde distintos niveles de entendimiento.
- Son capaces de analizar situaciones complejas y darles un sentido lógico.
- Conocen sus limitaciones.
- Puede ser original, percibir cosas y modelar su realidad.
- Utiliza lenguajes y símbolos.
Aunque en la década de los noventa sucedieron otros acontecimientos que cobraron relevancia para el mundo científico, como la máquina Deep Blue de IBM que le ganó en una partida de ajedrez al campeón mundial Gari Kasparov, no fue hasta el siglo XXI que los verdaderos cambios se empezaron a evidenciar en la vida cotidiana de las personas. Para entender estas transformaciones, es importante tener en cuenta las siguientes fechas:
- 2011: IBM pone a prueba su computador cognitivo Watson en un programa televisivo de concursos. Debido a que este equipo es capaz de acumular información, aprender mientras trabaja e interactuar con códigos de lenguaje humanos, logró enfrentarse a dos de los mejores concursantes del programa y ganar.
- 2012 - 2014: este periodo de tiempo es característico porque aparecen en el panorama los asistentes virtuales, que funcionan a partir del aprendizaje automático. Los más conocidos, por supuesto, son Siri por parte de Apple y Google Now por parte de Google. Estos programas se lanzan al público y revolucionan el modo en el que los seres humanos interactúan con la tecnología.
- 2018 - 2019: se empiezan a utilizar las IA para la optimización de procesos de negocio en diferentes industrias. Esto, a su vez, trae grandes resultados para el sector productivo, potencializa soluciones basadas en datos y se emplea la tecnología como medio para la realización de tareas.
Hoy en día, las Inteligencias Artificiales se emplean a partir de diferentes herramientas para el análisis de Big Data y forman parte de sectores esenciales para el desarrollo humano tales como el de salud, tecnología, turismo, movilidad, seguridad, economía y mucho más. Además, debido a su versatilidad, la IA también se emplea en oficinas y diferentes empresas, ya que ayudan a desarrollar mejores procesos. De hecho, su implementación es tan importante, que se estima una ganancia de 300 mil millones de dólares anuales a partir del 2024.
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